Ya debes haber oído que la depresión es el mal del siglo, ¿verdad? Y, por desgracia, eso es verdad. Pero antes de entrar un poco más en el asunto, vamos a definir qué es la depresión.
La depresión es una enfermedad clínica severa.
Supone una de las patologías más frecuentes en Atención Primaria y es la primera causa de atención psiquiátrica y de discapacidad derivada de problemas mentales.
Es un trastorno mental caracterizado fundamentalmente por un bajo estado de ánimo y sentimientos de tristeza, asociados a alteraciones del comportamiento, del grado de actividad y del pensamiento, y es más que sentirse “triste” por algunos días, Y, por ser una enfermedad que «no sangra», es decir, que no es tan visible como una fractura en un hueso, la depresión puede quedarse mucho tiempo dentro de nosotros sin que aceptemos o tengamos verdadera consciencia de lo que nos sucede.
Por ser una enfermedad que no sangra, la depresión puede quedarse mucho tiempo dentro de nosotros.
¿Cuáles son las causas de la depresión?
Existen muchas causas, incluyendo factores genéticos, biológicos, ambientales y psicológicos. La depresión puede comenzar a cualquier edad, pero suele empezar en la juventud o en adultos jóvenes. Es mucho más común en las mujeres. Las mujeres también pueden tener depresión posparto después de dar a luz. Algunas personas tienen un trastorno afectivo estacional en el invierno. La depresión es una parte del trastorno bipolar.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión?
- Sentirse triste o “vacío”
- Pérdida de interés en sus actividades favoritas.
- Aumento o pérdida del apetito.
- No poder dormir o dormir demasiado. Sentirse muy cansado.
- Sentirse sin esperanzas, irritable, ansioso o culpable.
- Dolores de cabeza, calambres o problemas digestivos.
- Ideas de muerte o de suicidio.
¿Cuáles son los tipos de depresión?
Depresión leve
Presenta baja del estado de ánimo y dos o tres manifestaciones más, como fatiga, alteraciones del sueño, del apetito, de la atención o concentración. Pero no afecta sus actividades de la vida diaria.
Depresión moderada
Presenta baja del estado de ánimo de forma importante, asociado a llanto fácil, agotamiento, molestias físicas, alteraciones del sueño, del apetito. Pensamientos de que “no vale nada”, “todo le sale mal”, aislamiento familiar o social. También se puede asociar ansiedad, nerviosismo.
Se diferencia de la depresión leve porque afecta las actividades de la vida diaria.
Depresión grave
Presentan baja del estado de ánimo de forma severa, llanto, tristeza, aislamiento, pérdida del sueño, del apetito, de interés en todas sus actividades. Piensan que no deben seguir viviendo porque afectan a los demás, que no son capaces de hacer nada, que no valen nada. Por lo tanto, comienzan a planear como podrían quitarse la vida.
Se diferencia de la depresión moderada porque se afectan por completo todas sus actividades de la vida diaria. Les incapacita.
¿Cómo detectar la depresión?
Signos de alarma: es importante identificar la depresión de forma oportuna para evitar su avance y el sufrimiento de la persona.
Se debe estar alerta a los cambios de comportamientos, de pensar y sentir en nosotros mismos y de las personas a nuestro alrededor.
Es frecuente al inicio:
- Sentir cansancio o agotamiento. Dormir, pero sin descansar.
- Alteraciones de la atención, concentración y memoria.
- Baja o aumento del apetito.
- Disminución de interés o placer en lo que le gustaba.
- Sensación de que no se ve bien, haga lo que haga.
- Alejamiento de la familia y de los amigos Disminución del rendimiento en la escuela, trabajo.
¿Cómo se trata la depresión?
Si eres uno de los más de los millones de jóvenes y adultos que tiene depresión, esos sentimientos no desaparecen. Persisten e interfieren con su vida cotidiana. Pero cuando la depresión se reconoce pronto y se trata adecuadamente, generalmente se puede responder favorablemente al tratamiento.
El tratamiento ideal de la depresión dependerá de las características específicas del subtipo de depresión y será, como siempre, personalizado, por lo que es fundamental una adecuada relación médico-paciente. Básicamente, el tratamiento se compone de psicoterapia y farmacoterapia.
El especialista médico indica el antidepresivo, dosis y tiempo que se debe tomar, para que se recuperen las sustancias químicas que necesita el cerebro. Si tienes ansiedad o insomnio, te indicará medicina contra ansiedad o insomnio. Es importante seguir al pie de la letra las indicaciones del médico y nunca automedicarte.
El Dr. Víctor Espínola Chena, especialista en Estimulación Cerebral no Invasiva, ofrece en su Centro tratamientos para la depresión resistente, con los más altos estándares de calidad en tecnología con maquinarias especializadas en Estimulación Magnética Transcraneal, aprobada por la FDA. Esta técnica funciona estimulando, mediante campos magnéticos, las células nerviosas del cerebro, esto produce el paso de una corriente eléctrica que despolariza las neuronas y se producen cambios en neurotransmisores y receptores, creando nuevas conexiones neuronales y modificando la actividad cerebral de forma eficaz y duradera, consiguiendo mejorar los síntomas de la depresión en el menor tiempo posible. Una vez se han superado los síntomas de la depresión, convendrá seguir bajo tratamiento antidepresivo el tiempo necesario para evitar posibles recaídas.