Controla tu metabolismo a través del conocimiento de tu equilibrio metabólico.
Cuando hablamos de equilibrio metabólico, queremos llamar la atención sobre dos fenómenos que impactan directamente en la salud de nuestras células, tejidos y órganos: los trastornos mitocondriales y la inflamación crónica silenciosa.
La mitocondria es un orgánulo intracelular responsable de la producción de energía de la célula. Muy estudiada, sus reacciones bioquímicas forman parte de todos los temas de estudio de las ciencias biológicas, donde su mayor ejemplo es el famoso Ciclo de Krebs, que representa la “respiración celular”.
Las mitocondrias son las centrales eléctricas de las células, las centrales eléctricas. Y como bien sabemos, sin energía, ¡nada funciona! De esta forma, el buen funcionamiento de la mitocondria y sus reacciones químicas determinarán el buen funcionamiento de las células y la salud del tejido y órgano del que forma parte.
Si es una célula cerebral, pensarás, procesarás emociones, retendrás la memoria, harás conexiones mentales y motrices, y un sinfín de funciones más que, al final, se pueden realizar de forma mala o patológica, normal u optimizada. El ejemplo clásico está en el comportamiento de tu memoria, pequeñas variaciones en las funciones cerebrales pueden afectarla, determinando un bajo rendimiento en los estudios, para leer un libro, para desarrollar pensamientos y, en definitiva, para recordar toda una vida como en el Alzheimer.
Si las mitocondrias en las células del músculo cardíaco no funcionan bien, pueden afectar la frecuencia cardíaca, la fuerza de contracción y el rendimiento físico para diversas actividades, lo que se traduce en fatiga y cansancio. En casos severos, puede provocar angina e infarto de miocardio.
El mismo proceso degenerativo puede ocurrir en cualquier tejido u órgano del cuerpo humano. Por ello, nuestra estrategia es optimizar el funcionamiento mitocondrial a través de diferentes protocolos que implican ajustes dietéticos, suplementación específica, actividad física y medicación. Uno de estos protocolos consiste en utilizar el “cuarteto mágico” formado por magnesio, carnitina, coenzima Q10 y D-Ribosa.
El segundo punto que afecta nuestro equilibrio metabólico es la Inflamación Crónica. Nuestro cuerpo tiene un sistema regulador proinflamatorio y antiinflamatorio balanceado por sustancias llamadas catecolaminas. Estos, a su vez, se originan a partir de ácidos grasos.
Este sistema regula la inflamación que, hasta cierto punto, es protectora y beneficiosa para nuestro organismo. Sin embargo, la vida moderna y sus desequilibrios dietéticos, conductuales y psicológicos conducen a un profundo desequilibrio en este sistema regulador. Hoy en día, estamos siendo atacados por diferentes situaciones como el sedentarismo, el estrés y las fuentes de alimentación inadecuadas.
Los alimentos son ricos en diversos químicos (conservantes, colorantes, metales pesados, etc.), saturados de grasas trans, grasas hidrogenadas y exceso de omega 6. Además, consumimos cantidades absurdas de carbohidratos simples representados por harinas y azúcares refinados. Además, priorizamos el sabor y la apariencia sobre el valor nutricional, consumiendo muchas “calorías vacías”.
El efecto de todo esto es un enorme aumento de la cadena proinflamatoria, favoreciendo un estado inflamatorio crónico que se traducirá con el paso de los años en resistencia a la insulina, síndrome metabólico, diabetes, enfermedad coronaria, síndrome de ovario poliquístico, depresión, Alzheimer y muchos otros.
Por tanto, mantener el equilibrio del estado inflamatorio es fundamental para una salud extraordinaria y es uno de los pilares de la verdadera medicina preventiva. Controla tu inflamación crónica y controlarás la aparición de varias enfermedades.
En términos simples ¿Qué es el equilibrio metabólico?
El equilibrio metabólico se refiere a la capacidad del cuerpo para mantener una tasa metabólica saludable y eficiente. Esto significa que el cuerpo es capaz de procesar los nutrientes de los alimentos de manera adecuada, producir la energía necesaria para el funcionamiento celular y eliminar los desechos del cuerpo. Cuando el equilibrio metabólico se altera, pueden surgir problemas de salud como la obesidad, la diabetes y enfermedades cardiovasculares, entre otras. Por lo tanto, mantener el equilibrio metabólico es fundamental para una vida saludable.
¿Cuál es órgano encargado de mantener el equilibrio metabólico?
El hígado es el principal órgano encargado de mantener el equilibrio metabólico en el cuerpo. El hígado es responsable de procesar los nutrientes y las toxinas que se encuentran en los alimentos y bebidas que consumimos. Además, también es responsable de la síntesis de proteínas y grasas, la eliminación de desechos y la regulación de los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre. En definitiva, el hígado es uno de los órganos más importantes en el mantenimiento del equilibrio metabólico en el cuerpo humano.
¿Cómo se evalúa el estado metabólico?
Existen diferentes formas de evaluar el estado metabólico de una persona, aunque en general, todas incluyen la medición de ciertos parámetros bioquímicos y fisiológicos. Algunos de los métodos más comunes son:
se pueden realizar diferentes análisis de sangre para medir los niveles de glucosa, lípidos, hormonas tiroideas, entre otros marcadores que indican el estado metabólico del cuerpo.
Medición de la tasa metabólica basal, se trata de una evaluación que se realiza en reposo, y mide la cantidad de calorías que el cuerpo necesita para mantener sus funciones básicas.
Análisis de orina, la orina también puede proporcionar información sobre el estado metabólico, ya que puede mostrar la presencia de ciertos compuestos que se producen como resultado de diferentes procesos metabólicos.
Antropometría, mediante la medición de la composición corporal, como el porcentaje de grasa corporal, se puede evaluar el estado metabólico de una persona.
Evaluación clínica el médico o un profesional de la salud puede evaluar el estado metabólico de una persona mediante la observación de sus síntomas, signos clínicos y factores de riesgo para ciertas enfermedades metabólicas.
¿Cuáles son las alteraciones metabólicas?
Algunas de las alteraciones metabólicas más comunes incluyen:
- Diabetes: Es un trastorno en el que el cuerpo no produce suficiente insulina o no la usa adecuadamente, lo que resulta en un aumento del nivel de azúcar en sangre.
- Obesidad: La obesidad es un trastorno metabólico que se produce cuando hay un exceso de grasa corporal. Puede ser causada por un desequilibrio entre la ingesta de calorías y el gasto energético.
- Hipotiroidismo: Es una condición en la que la glándula tiroides no produce suficientes hormonas tiroideas, lo que puede disminuir la tasa metabólica y provocar síntomas como fatiga, aumento de peso y depresión.
- Hiperlipidemia: Se refiere a niveles elevados de lípidos en sangre, como colesterol y triglicéridos. Esto puede aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca.
- Síndrome metabólico: Se refiere a un grupo de factores de riesgo metabólicos que aumentan el riesgo de enfermedad cardíaca, diabetes y otros trastornos.
- Enfermedades renales: Las enfermedades renales pueden afectar el equilibrio de los líquidos y electrolitos en el cuerpo, lo que puede tener un efecto en el metabolismo.
- Alteraciones en la función hepática: El hígado es un órgano clave en el metabolismo y cualquier enfermedad o trastorno hepático puede afectar el equilibrio metabólico.
¿Cuáles son las causas de los trastornos metabólicos?
Hay varias causas que pueden contribuir a los trastornos metabólicos, que incluyen:
Factores genéticos: Algunas enfermedades metabólicas son hereditarias, lo que significa que se transmiten de padres a hijos.
Estilo de vida: Una dieta poco saludable y la falta de actividad física pueden contribuir a problemas metabólicos como la obesidad, la resistencia a la insulina y la diabetes.
Enfermedades crónicas: Algunas enfermedades crónicas como la enfermedad renal o la enfermedad hepática pueden afectar el equilibrio metabólico del cuerpo.
Medicamentos: Algunos medicamentos pueden afectar el metabolismo del cuerpo y contribuir a trastornos metabólicos.
Factores ambientales: La exposición a toxinas ambientales como el plomo o los pesticidas también puede afectar el metabolismo del cuerpo y contribuir a trastornos metabólicos.
¿Cómo mejorar el desorden metabólico?
Para mejorar los trastornos metabólicos, es importante abordar las causas subyacentes de la enfermedad. Esto puede incluir cambios en la dieta y el estilo de vida, como hacer ejercicio regularmente, mantener un peso saludable, evitar alimentos procesados y ricos en azúcares, y reducir el consumo de alcohol y tabaco. También puede ser útil tomar suplementos dietéticos específicos y seguir una dieta equilibrada y adecuada para sus necesidades metabólicas individuales. En algunos casos, puede ser necesario tomar medicamentos recetados o recibir tratamiento médico para abordar problemas metabólicos más graves. El médico va a desarrollar un plan de tratamiento personalizado que acorde sus necesidades específicas.
¿Qué son las terapias de inyectables? ¿En qué consisten? y, ¿Cuándo se utilizan?
Las terapias de inyectables son un método cada vez más popular de tratamiento médico y consisten en la inyección de sustancias específicas directamente en el cuerpo. Estas sustancias pueden incluir vitaminas, minerales, aminoácidos, ácidos grasos y otros compuestos esenciales que ayudan a restaurar el equilibrio en el cuerpo y a mejorar la salud general.
Las terapias de inyectables se utilizan para tratar una amplia variedad de afecciones, desde trastornos nutricionales hasta problemas hormonales y enfermedades autoinmunitarias. También se utilizan para mejorar el rendimiento deportivo y la recuperación de lesiones. Al inyectar los nutrientes directamente en el cuerpo, se pueden lograr niveles óptimos de nutrientes que no se pueden obtener a través de la dieta o los suplementos orales. Además, la administración directa en el cuerpo permite una absorción más rápida y completa, lo que puede ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la salud de manera más efectiva. Es importante hablar con un médico o profesional de la salud para determinar si las terapias de inyectables son adecuadas para sus necesidades individuales y para desarrollar un plan de tratamiento personalizado.
¿Dónde se puede ubicarlo para las consultas?
- Clínica Vitale Medicine & Stetic – C.D.E. 0985-858524
- Clínica San Gabriel – San Alberto 0994- 454545
- Clínica Carmelitas – Asunción 0985-858524
- Clínica Veo- Asunción 0984-655488
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